Desde tacos, tortas y tamales hasta lo más refinados ceviches, en los mercados mexicanos uno siempre puede encontrar los platillos más exquisitos, chuparse los dedos y sentirse como en casa. ¿Y tú güerit@, ya tienes tu puesto preferido, el de toda la vida? ¡Eso es! Pero si no lo tienes, y si los fines de semana te sientes medio perdido y sin plan culinario, aquí te dejamos 5 recomendaciones increíbles para que goces las delicias tradicionales de este país directitas del puesto al plato. 

 

1. Caldo de camarón o antojitos mexicanos, ¡llévele! 

Ubicado sobre la Avenida del Imán, en la quinta sección del Pedregal de Carrasco se ubica uno de los mercados más maravillosos de la Ciudad de México. El famosísimo Imán, en el que podrás saborear el inigualable caldo de camarón de los «Mariscos Fernando»; deleitarte con  la fama del queso de puerco de «Aquí mis Chicharrones Truenan»; comerte un trozo del tasajo de «La Oaxaqueña» y probar el mixiote de «El Güero». También hay que  echarle el diente a las gigantescas quesadillas de «Los 10 Hermanos», a las carnitas de «Doña Silvia» y a los tacos de guisado de «El Padrino».

 

2. ¡Ay güerita, no te pases! Mejor ven al mercado matacrudas 

En el corazón de Garibaldi se ubica el mercado San Camilito, en el cual podrás encontrar puestos abiertos las 24 horas todos los días. La buena birria o los pozoles son las especialidad de este oasis de las crudas. Así que ya sabes, si de pronto te encuentras perdido y hambriento a latas horas de la noche, no deambules, mejor pasare por aquí y a comerte un taquito de chivo. 

 

3. Los Embutidos de Don Rey

En la sección de comida del vasto mercado de La Merced se encuentra el pues de embutidos «Don Rey», aquí encontrarás chorizos de todos los tamaños, jamón, queso de puerco y un carnoso chicharrón. ¿Te ánimas a probarlos? 

 

4. Tianguis con sabor marino 

Ubicado sobre avenida Revolución, en medio de varias zapaterías, frente a un hotel y un par de cantinas, el Mercado Mixcoac tiene buenas ostionerías, como «Puerto Vallarta» o «La Esperanza» y «La Playa». Pero también si tienes algún otro antojito, encontrarás puestos de pollo con mole de rechupete. 

 

5. El placer de un buen tlacoyo 

El Mercado de San Juan Arcos de Belén (no hay que confundirlo con el llamado Mercado de San Juan, que se encuentra entre Ernesto Pugibet y Ayuntamiento). Las razones por las que lo hemos pueston en la lista son: por  su abundancia de locales de tlacoyos bicolores (de maíz blanco y azul), todos del lado de Arcos de Belén, hacia Salto del Agua, y, en la banqueta sobre López, los extraordinarios puestos de nopalitos, aguacates criollos, guacamoles preparados (tienes que probar las salsas), requesones, quelites, habas, además de tortillas azules.